Un buen posicionamiento en Internet frente a tu competencia significa hoy el éxito de muchas empresas. La presencia de una marca en la red no puede ser solo testimonial, sino que debe de ser obligatoriamente relevante para que tenga sentido. Pero ponernos a la altura de nuestros competidores en la red o, incluso, superarlos no es un reto fácil para nadie. Ni siquiera para las empresas más potentes del mercado, que se ven obligadas a invertir mucho dinero, tiempo y esfuerzo para mantener sus posiciones.

Estrategias de publicidad para destacar sobre tu competencia

Si no contamos con un equipo de expertos en marketing ni con un riñón económico rebosante, hay otras cosas que podemos hacer para comer terreno a nuestros rivales y que, seguro, están a nuestro alcance. Para empezar, unos consejos en forma de grandes titulares: actuar, mirar de frente a la competencia y ser positivos. Si partimos de esa base, ya estamos bien encaminados.

Tampoco viene mal una pequeña dosis de realismo. Y es que prácticamente todos los sectores están hoy día muy explotados en internet y la competencia es salvaje. El motivo es que nuestro rival ya no es nuestro vecino o la tienda de la otra esquina. Ahora competimos en un mundo globalizado y hay que estar a la altura de las circunstancias. Y para ello, vamos a mirar con otros ojos a nuestros rivales, vamos observar con atención sus movimientos y vamos también a aprovechar las sinergias que nos da internet para remar en su misma dirección.

Para empezar, nuestra competencia puede ser un surtidor valioso de buenas ideas y de inspiración, así que bebamos de esta fuente prodigiosa. Nuestras marcas rivales también son, en sí mismas, una cantera increíble de clientes potenciales. Por ello, constituyen para nosotros una excelente oportunidad de negocio. Si tienen un mejor posicionamiento o nos superan, poco o mucho, en número de clientes y ventas es porque hacen cosas mejor que nosotros. Nuestro objetivo es averiguarlas y adaptarlas a nuestras posibilidades. Otros harán lo mismo con nosotros, así que no tengas remordimientos. Internet tiene sus propias reglas y hay que adaptar nuestro modus operandi a esta nueva realidad.

La publicidad en internet implica costos asequibles y nos iguala ante nuestras marcas rivales. Si le ponemos un poco de astucia, bastante de imaginación y muchas ganas, nos puede ayudar a ganar clientes, aumentar nuestras ventas y escalar posiciones. Te contamos algunos secretos para conseguirlo. Cuando hagas publicidad en Facebook oriéntala a la gente que tiene interés en tu competencia. Contrata publicidad en Youtube y prográmala para que salga justo antes del visionado de los vídeos de tu competencia. Crea una campaña en Google Adwords para que tus anuncios se activen en el área privada de cada usuario del correo de Gmail, cuando lean un correo de promoción de tu competencia.

Precisamente, en Google Adwords podemos buscar audiencias afines. Es decir, copiamos la dirección web de nuestro competidor para que Google nos indique cuales son sus audiencias afines. Cuando las tengamos, crearemos un anuncio y se lo enviaremos. Por último, te proponemos que descargues la lista de seguidores de tu competencia en Twitter. Luego, puedes elaborar un tweet promocional de tu marca y dirigirlo a los usuarios incluidos en ese listado. Con todas estas fórmulas, aprovechas el trabajo que ya han hecho tus marcas rivales para exponer la tuya ante sus propios usuarios.

En resumen, la competencia nos va a estimular para mejorar: implementar nuevos procesos, ser más creativos, invertir en nuestra marca y superar nuevas barreras desconocidas. Al final, tendremos que estar agradecidos a nuestros competidores porque, sin saberlo, nos ayudan a progresar y prosperar. Gracias!