“¿Qué hago primero, SEO o SEM?” es el nuevo “¿qué vino antes, el huevo o la gallina?”

En realidad depende de muchos factores, dado que cada uno tiene sus pros y sus contras. En este post os hablo de los beneficios y perjuicios de estas dos estrategias, con el fin de que os ayuden a escoger la mejor para vuestro caso.

SEO = posicionamiento orgánico del inglés Search Engine Optimization
SEM = posicionamiento de pago del inglés Search Engine Marketing

Por un lado, estudiosos del tema afirman que la búsqueda orgánica es responsable de aproximadamente el 64% del tráfico de todo el sitio, mientras que la búsqueda pagada genera solo el 6%.

Hay quien opina que lo ideal sería hacer una primera inversión en SEM (publicidad) para comenzar a atraer visitas, pero para mí lo primero este tener en cuenta aspectos como, por ejemplo, que nuestra web esté preparada, que sea una web atractiva, el tipo de producto o servicio que prestamos y el público al que nos dirigimos.

Además, es importante no olvidar la ya sonada ceguera a los banners desarrollada por el usuario, incluso tiene nombre propio (banner blindness), fruto de la sobreestimulación y sobreinformación a la que nos vemos enfrentados todos los días a través de medios on y offline.

SEO básico

  • Estructurad vuestras webs y contenidos de forma lógica y ordenada.

Hacer SEO de calidad no es en absoluto fácil y por eso es mejor contar con un experto, pero si queréis intentarlo, empezad por lo más básico.

SEM básico

A la hora de considerar una campaña SEM, tendremos que valorar el tipo de publicidad que más se ajuste a nuestro propósito:

Búsqueda

Shopping

Display

Aparecer en cada uno de los ejemplos anteriores supone una inversión considerable de tiempo y dinero. Lo primero de todo es reflexionar sobre los siguientes puntos sobre nuestra web.

  • ¿Tiene mi web un aspecto atractivo y aporta valor al usuario?
  • ¿Dispone de contenido suficiente como para resolver cualquier cuestión relacionada con mi nicho de mercado?
  • Si yo fuera usuario, ¿entraría y me quedaría paseando entre las páginas?

Si a todo lo anterior habéis respondido con un sí, entonces es el momento de plantearse seguir una estrategia SEM.

EJERCICIO PRÁCTICO: «zapatería infantil»

¿Cuál de las siguientes páginas ofrece una mejor experiencia de usuario e invita a bucear sobre sus páginas?

Es importante saber que por mucho que el SEM nos “garantice” visitas, de visitas no se vive, pero de ventas, sí. Los anuncios de pago irrumpen en la actividad del usuario para ofrecerle productos o servicios que, conforme a su perfil, podrían o no interesarle.

El contenido orgánico va directamente a nuestro buyer persona. Se dirige al público que hace una búsqueda específica sobre un tema concreto con lo que hay una intención de acción por su parte.

El quid de la cuestión es el siguiente: si no tenéis una página web optimizada, para qué te gastar tiempo y dinero en campañas SEM que atraerá gente a una web que no es atractiva, de información pobre y que impide que encuentren lo que buscan. Lo único que conseguimos así, amigos míos, es un peligroso efecto rebote, es decir, el típico ejemplo de tirar dinero.

Conclusión

Lo primero es tener una web donde la experiencia del usuario sea positiva, una web por la que apetezca pasear.
Después, y constantemente, trabajaremos el SEO para llegar siempre a nuestro público de mayor calidad, aquel que voluntariamente nos busca o quiere información que podemos darle.

Para terminar, agrandaremos nuestro abanico con una buena campaña SEM que nos haga las veces de cohete en cuanto a visibilidad se refiere. Cojamos los altavoces y démonos a conocer si nuestro negocio y sector lo permiten.